El objetivo de la ortodoncia no sólo es la corrección de los problemas de mordida y la alineación de los dientes, tenemos que tener en cuenta el importante papel que juegan los maxilares (el asiento de los dientes) que no sólo forman parte de la masticación sino que son la base de la estructura del óvalo facial.
De ahí, que una buena mandíbula bien estructurada aporta no sólo una buena masticación y una articulación correcta, sino también una estética armónica del rostro. Gracias al gran desarrollo de las técnicas de ortodoncia en los últimos tiempos nos es posible corregir los diferentes desequilibrios del rostro, en mentón, mejillas o labios.
DRA. MARIANA SACOTO NAVIA 