Las personas con diabetes corren el riesgo de padecer infecciones en la boca, en particular, la enfermedad periodontal que afecta seriamente a las encías. Esta enfermedad puede dañar las encías y los huesos de la mandíbula que sostienen a los dientes en su lugar, lo que también puede causar dolor al masticar. Algunas personas pierden los dientes debido a las infecciones graves en las encías. Además, la enfermedad periodontal también podría dificultarle el control de la glucosa (azúcar) en la sangre.
Otros problemas en la boca causados por la diabetes son una afección llamada “boca seca” (xerostomía) y una infección por hongos llamada candidiasis bucal. La boca seca ocurre cuando no hay suficiente saliva. La diabetes también puede aumentar el nivel de glucosa en la saliva. La combinación de estos problemas podría resultar en aftas, unas pequeñas úlceras blanquecinas que aparecen en la boca y que son dolorosas.
Si tienes diabetes cuida tu sonrisa, cepíllate los dientes y usa el hilo dental todos los días, no olvides visitar al dentista regularmente.