Durante el tratamiento ortodóntico se busca lograr mediante una serie de movimientos dentales, la oclusión óptima, satisfaciendo así las necesidades del paciente desde el punto de vista funcional y estético.
En el afán por lograr dicho movimiento, una vez instalada la aparatología ortodóntica en la cavidad bucal y motivada a la presión ejercida por la misma sobre el periodonto, el paciente suele referir dolor como queja principal luego de la aplicación de fuerzas en el transcurso de su tratamiento.
Debido al dolor resultante de la liberación de mediadores de la inflamación inducida por los cambios en los tejidos periodontales e incluso pulpares, suelen indicarse diversos medicamentos para alivio del paciente, sin tomar en cuenta que dichos medicamentos no sólo cumplen con la función analgésica sino también con la de antiinflamatorio pudiendo afectar la velocidad del movimiento dentario llegando incluso a retardarlo.
El presente artículo ofrece una revisión bibliográfica cuyo objetivo es informar a los odontólogos generales y especialistas en Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial, acerca del efecto ejercido por los diferentes analgésicos y algunos otros fármacos disponibles en el mercado sobre el periodonto y la manera en que afectan al tratamiento ortodóntico.
El movimiento dental es un fenómeno complejo y varios estudios han tratado de explicar su mecanismo. De acuerdo con la teoría presión-tensión, el movimiento dental se produce en tres etapas: alteraciones en el flujo sanguíneo asociados con la presión en el ligamento periodontal, la formación o liberación de mensajeros químicos y la activación de células (1)
Diversos estudios se han realizado en función de determinar las verdaderas implicaciones que poseen algunos medicamentos sobre el movimiento dental, sin embargo, hoy día este tema continúa siendo ampliamente discutido.
Existen grandes posibilidades de que en el futuro se apliquen rutinariamente agentes farmacológicos para manipular el movimiento dental en ambas direcciones. Se ha comprobado que la inyección directa de prostaglandina en el ligamento periodontal acelera el movimiento dental, pero es bastante dolorosa. Sin embargo ya se comercializan fármacos que inhiben el movimiento dental, aunque todavía no se prescriben debido a su efecto inmovilizador (2)
Este estudio intenta resaltar las consideraciones que se deben tener en cuenta, a fin de evitar posibles complicaciones durante el tratamiento ortodóncico en aquellos pacientes que se encuentren bajo la influencia de determinados medicamentos.
MATERIALES Y METODOS
Se realizó una revisión sistemática de la literatura relacionada a los efectos de los medicamentos utilizados durante el tratamiento de ortodoncia y su influencia en el ritmo de movimiento dental. La estrategia de búsqueda incluyó información obtenida en la red, principalmente PubMed y Medline tomando en cuenta aquellos estudios donde se utilizaron modelos semejantes de grupos experimentales con al menos 5 animales así como un grupo control y/o un grupo placebo, en los que previo, durante o posterior a la colocación de un dispositivo ortodóntico se aplicaba de manera local o sistémica una o varias drogas que se supone afectaban algún proceso fisiológico (en los grupos experimentales) y tales aplicaciones, junto con los resultados y análisis estadísticos eran explicados de manera precisa.
DISCUSION
La aplicación de las fuerzas utilizadas para el movimiento dental causa una inflamación local, incrementando la permeabilidad vascular y estimulando infiltración celular, así, linfocitos, monocitos y macrófagos se infiltran en el tejido inflamado, donde las prostaglandinas son liberadas. Las prostaglandinas promueven la resorción ósea, no solo por el incremento en el número y el tamaño de los osteoclastos, sino también por estimulación de los existentes. Este mecanismo de resorción puede estar relacionado con la presencia de mediadores inflamatorios como la prostaglandina E2 (PgE2) y las interleucinas (IL-1ß), las cuales interactúan con las células óseas (3)
Los anti-inflamatorios no esteroideos, comúnmente utilizados para controlar las molestias asociadas con el movimiento dental ortodóncico, inhiben la actividad de la ciclo-oxigenasa y con ello la síntesis de las prostaglandinas. Esto a su vez puede afectar el mecanismo del movimiento dental (inflamación), dando como resultado una inhibición del remodelado óseo (3)
Por el momento, es difícil encontrar agentes que estimulen el movimiento dental, aunque la administración de vitamina D puede potenciar la respuesta a las fuerzas ortodóncicas. (2) El 1,25 dihidroxicolecalciferol es la forma biológicamente activa de la vitamina D y es considerado una de las tres hormonas calcificantes. En varios estudios, se ha demostrado que el 1,25 DHCC estimula la resorción ósea mediante la inducción a la diferenciación de osteoclastos a partir de sus precursores y aumenta la actividad de los osteoclastos existentes (4)
Arias y Marquez-Orozco en su estudio publicado en 2006 encontraron que el Ibuprofeno y la aspirina redujeron el número de lagunas de resorción y osteoclastos en la zona de presión de los dientes movidos con ortodoncia, el Acetaminofen no redujo el número de lagunas ni de osteoclastos en esas aéreas. El movimiento dental durante los 10 días de estudio fue más lento en el grupo de aspirina e ibuprofeno que en el grupo control y de Acetaminofen (5)
Salmassian, Oesterie, Shellhart y Newman Concluyen que el Acetaminofen e ibuprofeno son igualmente eficaces en la reducción de molestias luego de instalada la aparatología ortodóntica y que el Acetaminofen a diferencia de los AINES, está inactivo como agente antiinflamatorio en los tejidos periféricos y no impide la síntesis de prostaglandinas y el movimiento del diente (1)
En el estudio de comparación del efecto del 1,25 dihidroxicolecalciferol y la prostaglandina E2 en el movimiento ortodóncico dental se demostró que aunque la cantidad de movimiento dental fue similar, la actividad osteoclástica fue mayor en el grupo al que se le inyecto la PGE2 (4)
CONSIDERACIONES ESPECIALES
Esteroides:
En un estudio donde se utilizaron esteroides como tratamiento agudo y crónico en ratas, se registró la cantidad de lagunas con o sin cementoclastos, el grupo de tratamiento agudo presentó más recesión a nivel mesio coronal en comparación con los otros grupos. Los investigadores adjudicaron el resultado al desbalance entre la actividad osteoblástica (inhibida por la droga) en la fase inicial de la administración de la misma. Como consecuencia de esto se sugiere un monitoreo cuidadoso de los pacientes sometidos a tratamientos agudos con cortico esteroides (6)
Bisfosfonatos:
Son análogos sintéticos de los pirofosfonatos inorgánicos cuya estructura P-O-P es un regulador endógeno del recambio óseo que inhibe la resorción y la mineralización in vitro. Estos fármacos han sido desarrollados y utilizados en las últimas décadas en el diagnostico y tratamiento de enfermedades metabólicas óseas como la hipercalcemia, la enfermedad de Paget y la osteoporosis. Solo en estudios recientes en ratas se han utilizado como una opción farmacológica en el ámbito de la ortodoncia para maximizar el anclaje de los dientes donde es aplicado. Igarashi et al., en estudios con ratas Wistar encontraron que la administración tópica y sistémica de bisfosfonatos causa una reducción significativa del movimiento de los dientes (7)
Tiroxina:
Es la principal hormona secretada por las células foliculares de la glándula tiroidea, usualmente se emplea como medicamento de remplazo hormonal en casos de deficiencia. El estudio de los investigadores Shirazi M, Dehpour AR, Jafari F, demostró que la administración de L-tiroxina aumentó significativamente la cantidad de movimiento dental. El grado de reabsorción radicular disminuyó con la administración de este medicamento (8)
CONCLUSIONES:
Actualmente es común el uso de analgésicos durante el tratamiento odontológico y es menester que el profesional de la salud esté plenamente capacitado a la hora de prescribir el fármaco que se amerite en cada situación.
Los medicamentos más frecuentemente empleados en el área de ortodoncia son el ibuprofeno y el Acetaminofen y la comparación del efecto que ambos que tienen sobre el movimiento dental en los diversos estudios consultados, señalan al Acetaminofen como analgésico de elección, debido a que se diferencia de los aines, porque está inactivo como agente antiinflamatorio en los tejidos periféricos y no impide la síntesis de prostaglandinas y el movimiento del diente.
Existen fármacos de consideración especial como los bisfosfonatos, las hormonas y los cortico esteroides, los cuales poseen características que influyen directamente sobre el movimiento dental.
Fuente: ortodoncia.ws